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23/10/11

OSTEOPATÍA VISCERAL


La osteopatía es una e indivisible y trabaja a todos los niveles: estructural, craneal y visceral.


¿Porque tratar las vísceras?


Cuando se habla de osteopatía pensamos en huesos.

Los huesos son el armazón de sostén de nuestro cuerpo y no se pueden mover solos.

Para el movimiento tenemos los músculos, pero solo pueden reaccionar a dos estímulos: contracción / relajación.

Quién manda la información es el cerebro, por eso es importante que el cráneo esté libre de tensiones.

Las vísceras intervienen de dos maneras en la mecánica corporal:

  • se sujetan a la estructura ósea a través de ligamentos.


Cada día respiramos 20.000 veces, el corazón late 100.000 veces, los 8 metros de tubo digestivo, reducen, disuelven, separan, absorben y expulsan 1kg de comida, los riñones filtran 180 litros de sangre en flujo continuo para generar 1.5l de orina, el hígado produce 1l de bilis, el páncreas 1.5l de jugo pancreático.

Así cualquier ptosis (bajada de un órgano), prolapso (caída de un órgano), espasmo o movimiento alterado, genera una tensión sobre las vértebras donde se agarra y perjudica su función.

  •  cada uno tiene una gran variedad de funciones imprescindibles para la homeostasis (equilibrio metabólico) y la estabilidad química del cuerpo.


A través de la absorción de nutrientes, agua y oxígeno (y la expulsión de desechos en heces, orina, y CO2) el cuerpo se mantiene vivo. Todo esto ocurre a nivel químico y molecular.

La química de nuestro cuerpo influye sobre su mecánica y nuestra psicología a través del cambio de ph, de las toxinas depositadas, de las carencias generadas, etc.



¿Como se tratan?


El osteópata aprende a lo largo de sus estudios a desarrollar una gran sensibilidad en sus manos para percibir el MRP y la motilidad.

El Movimiento Respiratorio Primario es un movimiento intrínseco de todos los huesos del cuerpo, independiente de la respiración pulmonar, tiene un ritmo de 8 a 12 ciclos por minuto y consta de una fase de expansión y de una fase de retracción.
La motilidad se percibe en todas las estructuras corporales (huesos, músculos, fáscias, vísceras, etc.) a un ritmo más lento, 4 a 8 ciclos por minuto, y parece generado por la vibración sintónica de todas las células del cuerpo.

Porque las células son "organismos" complicados, llenos de elementos en actividad constante para la alimentación, respiración, replicación y comunicación que forman la vida celular.

Es importante que estos movimiento sean harmónicos, regulares, simétricos y con una amplitud y potencia correcta.

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